El Casinet (El Vendrell, Tarragona)

Las paellas y los arroces visten, aromatizan y alimentan este restaurante ubicado en una situación privilegiada frente al mar

No soy de playa, lo confieso. Es pensar en ponerme un bikini y enseñar mis lindas lorzas, en la arena que reboza hasta aquellos lugares de tu cuerpo más insospechados y en el sol que cada vez se siente más pesado y me irrito. Sin embargo, mi gente ya sabe cómo engañarme para acercarme a la playa. Sólo hay que mencionar la palabra mágica: «arroz». Así que si el plan playa viene acompañado de un plato de arroz con brisa marina, entonces accedo a acercarme a las olas.

Mesa del exterior en El Casinet, frente al mar.

El año pasado, en una de esas ocasiones, descubrimos el restaurante El Casinet, frente a la playa de Sant Salvador en El Vendrell. Mientras caminábamos por el paseo nos atrajo su edificio, un caserón de 1780 de aires marineros -con paredes blancas y persianas azules-. Aunque sobre la misma arena cuentan con un box (chiringuito) y en el paseo con unas cuantas mesas, los espacios más interesantes se esconden en el interior de la masía. Allí nos encontramos con un salón diáfano, con un par de rincones más íntimos en salas anexas. Banderines, lámparas gigantescas y mucha pintura blanca y azul hacen que te sientas como en una verbena. Las gradas de lo que fue anteriormente un casino sirven ahora para ofrecer un espectáculo gastronómico, con una larga fila de paelleras al fuego. Allí se cuecen los reyes de la casa, los arroces. «Quién pudiera catarlos todos allí arriba», pienso siempre que voy a El Casinet.Por supuesto, perfum d’arròs en todo el lugar.

La fórmula –sabrosa cocina marinera con toques de creatividad y presentaciones curradas– les funciona muy bien; difícil  es conseguir mesa un mediodía sin tener reserva previa. Sólo una objeción de El Casinet: el personal de sala se ha mostrado algo despistado en las últimas visitas.

Interior del restaurante El Casinet.

Las croquetas de arroz negro, el pescaíto frito estilo Casinet, la ensalada de mango y nube de parmesano o langostinos crujientes son algunos de los entrantes que aconsejo pedir. Todos vendrán acompañados de unos aperitivos, sorpresa y detalle de la casa. Y de segundo, no dudéis en decantaros por un arroz: negro, de verduras y ceps, de sepia y patatas estofadas o, el que para nosotros es el mejor, el Sarandonga, con bacalao y setas. Preparaos para la traca final cuando acabéis de comer. Os plantarán una torre de postres que os dejará noqueados (¡preguntad por los precios para no llevados sustos!). Os veréis obligados a pedir cualquiera de ellos, os lo digo yo. Todos son de elaboración propia y todos van acompañados de un prepostre, cortesía del restaurante.

Aperitivos de la casa: melón con jamón y sangría de cava y mango.

Segundo aperitivo, cortesía de la casa. Camarones fritos.

El arroz Sarandonga, con bacalao y setas. De capa fina y grano impregnado de sabor a bacalao.

Nube de coco con azúcar de menta y crema de tomillo con azúcar de anís (prepostres de cortesía).

Torre de postres de El Casinet.

Precio (2 personas): 68,25€ que incluyen un entrante, un arroz para dos personas, un postre para compartir y un par de bebidas, además de los aperitivos y prepostres de cortesía. Nos pareció un precio correcto para la calidad que ofrece el lugar en los platos. El Casinet es un restaurante de playa moderno donde volvería con amigos, familiares y pareja. Eso sí, impondría la condición de que a la mesa SIEMPRE llegue un plato de arroz.

El Casinet

Tel: 977 68 00 47
casinet.net