Specchio Magico (Barcelona)
INFORMACIÓN IMPORTANTE: Este restaurante ha cerrado sus puertas.
Es muy curiosa la forma en que llegamos a este restaurante. Fue hace años cuando, como siempre explica él, mi maridito aun me sorprendía llevándome a comer a restaurantes (ahora dice que lo de sorprenderme en ese tema es más que imposible). Al restaurante Specchio Magico llegó a través de un anuncio en un periódico y me sorprendió llevándome una noche en plan romántico.
Aquel día triunfó. No sólo él, sino el sitio también.
Hace poco nos entró la ansia de comida italiana y pensamos en él. Teníamos muy buen recuerdo de la noche que lo visitamos, hace años ya, y queríamos comprobar si todo seguía igual. Y ya os avanzo que sí, la comida fue de nuevo excelente. Aunque pensábamos encontrarnos algo diferente: la decoración, mantelería, cubertería y mesas siguen exactamente igual y quizás necesiten un poco de lavado de cara.
Las raciones de los platos son exageradamente grandes por lo que no se recomienda hacer la fórmula de pedir un primero para compartir y un segundo porque entonces el segundo plato se quedará a la mitad, seguro. La pasta es exquisita, con queso parmesano rallado al instante. Tanto los fagottini como los raviolis estuvieron magníficos (pasta y salsa).
En los postres ocurre algo similar con el tamaño de las raciones. No es que tengan una extensa carta pero cualquier postre está buenísimo (¡no os cuento cómo estaban las moras de la panacotta!). Tienen dos tipos de tiramisú y al pedirlo te preguntan si te gusta con más bizcocho o más cremoso.
Para beber: una botella de Pèppoli Chianti Classico. Nos apetecía mucho un Chianti y nos dimos el capricho porque era el vino más caro de la cara y eso fue lo que hizo engordar la cuenta. El vino lo encontramos buenísimo (en nosotros es extraño que acabemos con la botella de vino y de este no quedó ni el culín…). Una pena que no nos lo sirvieran en unas copas un poco más decentes (fueron similares a las de agua).
Precio (2 personas): 80,04€. Hay que tener en cuenta que pedimos el vino más caro de la carta, si no hubiese sido así y hubiésemos escogido uno de precio medio el precio por persona hubiera estado de unos 30-35€.
Por la internete se considera uno de los mejores italianos de Barcelona y nosotros estamos de acuerdo si consideramos la comida que se sirve. Aún así creemos que aspectos como la cristalería o la comodidad de las mesas son bastante mejorables. Ah! Se me olvidaba explicar un detalle que para nosotros suma puntos: un buen italiano tiene que estar provisto de buen pan para poder mojar las salsa y éste lo tiene!
Specchio Magico
08006 Barcelona,
Tel: 93 415 33 71
julio 16, 2012, 7:00 am
jeje, gran detall este del pan 🙂
julio 16, 2012, 8:41 am
Ah, esta pasta se ve muy buena, la verdad que en España no es muy fácil encontrar buenos restaurantes italianos. Lo del buen pan, se agradece, aunque a los italianos les parece raro comer pan y pasta (carbohidrato con carbohidrato)… jajaja, a mí el pan me gusta con todo, claro. Los precios, muy buenos.
julio 27, 2012, 11:31 pm
Tienes razón, aqui en españa lo que mas se encuentran son italianos de mala copia pero no italianos de verdad..
… Y lo del pan, con lo bueno que es mojar la salsa!
julio 16, 2012, 10:05 am
Es un buen restaurante italiano, caro pero bueno. Por cierto en este restaurante se reunían Laporta y Rosell cuando no iban a la greña y se ve que es habitual encontrar algún barcelonista de pro. Yo he ido una vez y el único famoso del local era yo 🙂
julio 27, 2012, 11:33 pm
No sabía lo del Barça! Con nosotros cenaron un par de turistas y un par de amigas y ya está.. Se nota la crisis 🙁
julio 16, 2012, 2:50 pm
Hay dios Mio!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Todo riquisimooooooooooo!!!!!
un beso
Mer
PD Hoy publique mi nueva entrada, No te la pierdas es un recorrido por Buenos Aires
http://www.foodandtravelbymer.com/mis-viajes/mi-buenos-aires-queridopequeno-recorrido/
julio 29, 2012, 10:35 pm
Nuestros comienzos en el mundo culinario fueron desde abajo (macdonals, pans..) y claro llevarte a aquel sitio (que estaba tal cual) fue una gran sorpresa. Ahora tendre que sorprenderte con otras cosas 😉