Ruta de cupcakes en Nueva York

No me considero una fanática de los dulces y tampoco de los cupcakes, pero desde que esta moda repostera ha aterrizado en la faz de la tierra la persigo por todo lo que ello conlleva en el mundo de la gastronomía. Me suscita mucha curiosidad el negocio en sí, su forma de venderse, su marketing, sus nuevas dimensiones pero sobre todo me intriga cómo evolucionará en los próximos años.

Aunque este pastelito parezca muy actual, la realidad es otra: desde su primera aparición, en el primer libro de cocina americana American Cookery, hasta hoy han pasado ya más de dos siglos. Pero ha sido en estos últimos años cuando los cupcakes han cogido más fuerza. En nuestra visita a Nueva York pudimos constatar que esta ciudad, y seguramente Estados Unidos en general, no puede vivir sin ellos. Cada tres calles hay una tienda.

Aquí os dejo una selección de establecimientos donde se sirven cupcakes. Cada uno de ellos tiene su peculiaridad. 

• Bake Crumbs Shop. Sus cupcakes tienen un tamaño más grande de lo habitual. Venden cupcakes con coberturas de lo más variadas y elaboran el Colossal, un gigantesco cupcake para alimentar a ocho personas. En Nueva York tienen 28 sucursales.

https://www.crumbs.com/

• Magnolia Bakery. Conocida por salir en la famosa serie de Sexo en Nueva York, es de las más visitadas en esta ciudad. Tiene cuatro tiendas en Nueva York, con locales que siguen una estética muy vintage. Es de las pocas que tienen sucursales en otros países como Dubai. 

https://www.magnoliabakery.com

• Molly's Cupcakes. La dueña de esta tienda abrió este negocio en honor a su infancia  y a una maestra suya que le regalaba cupcakes. Su único local en Nueva York sorprende por los asientos en forma de columpio. Destinan parte de sus beneficios a los niños pobres de la ciudad.

https://www.mollyscupcakes.com/

• Baked by Melissa. Venden cupcakes de tamaño mini. Su lema es "un cupcake pequeño puede llegar más lejos" y en sintonía a esto ofrecen sus productos sólo para llevar. Tienen diez sucursales en esta ciudad.

https://www.bakedbymelissa.com/

• Billy's Bakery. Entre todas las pastelerías que hacen cupcakes, esta es la más exitosa entre los neoyorkinos. Sus locales tienen aires a años cuarenta y en sus cupcakes prevalece el sabor a la decoración. Tiene tres sucursales en Manhattan.

https://www.billysbakerynyc.com/

Como os digo, es inevitable pasear por esta ciudad y no cruzarse con algún cupcake. Incluso alguno puede que sea andante ;)

Se avecinan cambios!

En breve este blog abandonará la plataforma blogger por lo que os recomiendo a todos aquellos que habitualmente entráis al blog desde www.currycurryquetepillo.blogspot.com que a partir de ahora nos visitéis a través de www.currycurryquetepillo.com.

Gracias por vuestra comprensión.

Se avecinan cambios y de los buenos :-))))

Bangkok Café (Barcelona)

Bangkok Café

calle Evarist Arnús, 65

08014 Barcelona

Tel: 93 339 32 69

El nombre de este blog no es casualidad. Si tengo que elegir una entre todas las especias que existen en este mundo, me quedo con el curry. En la cocina tengo unas cinco variedades y siempre que algún conocido viaja a la India o a algún país exótico donde se use en su cocina, le pido que me traiga un poco.

En general, existen falsas creencias sobre el curry. El término 'curry' proviene de los países indios y define a la salsa elaborada con mezcla de especias que se sirve en guisos y estofados, acompañados normalmente de arroz. Y hablamos de curry como si de un único condimento se tratara pero en realidad es un polvo elaborado a base de muchas especias: azafrán, ají, cardamomo, canela, cilantro, comino, cúrcuma, cebolla seca, nuez moscada, jengibre, mostaza, pimienta cayena, pimienta entre otras. 

Un buen lugar donde comer platos con curry en Barcelona es el Bangkok Café, un restaurante tailandés ubicado en el barrio de Les Corts. Su local, de reducidas dimensiones, tiene la peculiar característica de que comedor y cocina comparten espacio resultando irremediablemente un ambiente mezcla de ruidos, olores y gentío. 

Aperitivo invitación de la casa: tostada con pollo y mousse de curry Panang.

Rollitos de primavera vegetales

Raviolis al vapor de pasta de arroz rellenos de gambas y verduras

Panang Kai (pollo con crema de coco, curry Panang y cacahuetes).

Curry rojo con berejenas y verduras y arroz blanco perfumado al jazmín tailandés

Postre de mango con arroz glutinoso y salsa de leche de coco.

Precio (2 personas): 52,30€ incluyendo refresco, agua y tres cuencos de arroz blanco. No conocemos de primera mano la verdadera cocina tailandesa pero sí que podemos decir que los platos de curry a nosotros nos resultaron sublimes sobre todo por sus salsas y el punto entre cocido y crujiente de sus verduras. El postre de mango, dulce y delicado, hizo que el final de la cena superara notablemente el inicio de la misma, pues sus entrantes no alcanzaron la excelencia de los currys y postre.

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La memoria del gusto: Waffeln

Seguro que en vuestra memoria tenéis algún sabor anclado que desearíais volver a probar. Se trata de la memoria del gusto y suele jugar un papel muy importante en nuestra forma de comer. Nuestras preferencias gustativas se van formando gracias a esta memoria y es ella la que, de vez en cuando, nos recuerda que nuestro paladar está falto del placer que nos produce cierto plato de comida del pasado.

Yo podría enumerar una larga lista de comidas que se quedaron grabadas en mi memoria y que me gustaría volver a saborear. Por suerte, y gracias al destino, una de ellas he podido recuperarla incluso sin tener que trasladarme a su ciudad de origen. El sabor y la textura del waffel, una oblea similar al gofre de procedencia alemana, han aterrizado de nuevo en mi paladar después de años y años. Una gustosa experiencia traída del pasado.

Lo más complicado de esta receta no radica en ella misma, sino en la máquina que hay que usar para cocinar la masa de los waffeln. Se trata de una especie de gofrera con la que al cocer la masa se obtiene una torta con forma de corazones. La receta de waffeln que os dejo a continuación está extraída de un libro alemán y entiendo que si se hace con otro tipo de gofrera también saldrán buenos.

Receta (masa para unos 10 Waffeln):

125 gr de mantequilla pomada
75 gr de azúcar
4 yemas de huevo
1 cs de azúcar de vainilla
1 pizca de sal
0,75 l de leche
200 gr de harina
4 claras
rayadura de piel de limón
azúcar glass

1. Batir el azúcar, la mantequilla y las yemas.Añadir el azúcar avainillado, la sal y la rayadura de limón.

2. Añadir poco a poco la leche y la harina tamizada.

3. Montamos las claras de huevo a punto de nieve. Incorporamos al resto de la mezcla con una espátula para no perder el volumen de las claras.

4. Calentar la gofrera. Añadir un par de cucharadas soperas de masa y esparcir ligeramente. Cocer. Espolvorear con azúcar glass al gusto.

Desde aquí os animo a recuperar ese recuerdo que se quedó clavado en vuestras papilas gustativas. Intentadlo y veréis que la satisfacción que produce es toda una experiencia para el paladar y la memoria.

Restaurante Serrano (Astorga, León)

Restaurante Serrano

calle Portería, 2

24700 Astorga (León)

Tel: 987 617 866

www.restauranteserrano.es

No es tarea fácil acertar restaurante. Comer en uno u otro lugar viene condicionado por tantos factores que es difícil dar con el restaurante que en ese momento se adapta a tus preferencias y necesidades. Si además uno se encuentra fuera de su zona, la cosa se complica más. En ese caso, yo suelo recurrir a mi buen olfato y, cada vez más, a las redes sociales.

A medio viaje entre Barcelona y Galicia se nos antojó que Astorga sería un buen lugar donde dejar descansar nuestro cuerpo y alimentarlo para continuar el viaje. Después de una visita rápida a la catedral, aterrizamos en el restaurante Serrano confiando en las buenas críticas del Foursquare y en el buen aspecto exterior del local.

Nos encontramos que detrás de una primera imagen de casa de comidas clasicona se escondía una cocina tradicional con toques de actualidad. El servicio de aquel día fue impecable y prueba de esta conjunción clasicidad-modernidad fue lo bien que se adaptaron a nosotros pidiendo todos los platos para compartir como si de tapas se trataran.

Cecina de Astorga con polen, foie y aceite de oliva. Gran plato.

Setas de temporada, excelentes.

Ensalada de mango, brotes frescos y carne de centolla. Quizás faltó aliño.

Sopa de cocido para compartir. Buenísima.

Semifrío de chocolate blanco y coulis de frambuesa. Muy bueno.

Precio (3 personas): 64,30€ incluyendo además tres refrescos y un té. Lo que comimos no fue lo más representativo de su carta pero el resultado fue muy bueno porque ningún plato obtuvo crítica. Si volviera, no dejaría de pedir la especialidad del lugar, el cocido maragato, y las croquetas de cecina de Astorga y queso de cabra Veigadarte.

Un dato importante a tener en cuenta es que el restaurante Serrano no sólo se dedica a cocinar sino también a predicar la cultura gastronómica del lugar y realiza así jornadas gastronómicas sobre las setas, la matanza, la cocina napoleónica y la cocina maragata. Qué pena que no nos quede cerca de casa....

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Nimbin (Molins de Rei, Barcelona)

Restaurant Nimbin
calle Rafael Casanovas, 50 bajos
08750 Molins de Rei
Tel: 93 680 55 39

www.restaurantenimbin.com

Desde nuestra visita a Londres, somos adictos al hummus en casa. Eso ha provocado también que algunas de las últimas visitas a restaurantes vengan condicionadas por la presencia de este plato en sus cartas. El restaurante Nimbin de Molins de Rei nos llamó la atención precisamente por ofrecer hummus y durums en un ambiente completamente diferente al de los kebabs o los típicos libaneses. 

El exterior del local te hace pensar que se trata de una tetería árabe (y cierto es que tienen una carta bastante amplia de tés). Una vez dentro la cosa se asemeja más a un bar de tapas: servicio joven y rápido, carta a base de platillos, mucha cerveza y pocos vinos. 

La carta desconcierta un poco y es que mezcla cocina árabe, japonesa, italiana y mediterránea. Nimbin pretende ofrecer al comensal de Molins de Rei una mezcla de culturas gastronómicas sin tener que desplazarse para ello hasta Barcelona. 

Navajas gallegas con aceite de jamón de jabugo y pimentón. Excelentes.

Falafel, de elaboración propia. Muy bueno.

Hummus servido con pan de pita con cardamomo frito (hecho por ellos mismos).

Foie Barbie y Ken: foie, mermelada frutos rojos, huevo de codorniz y neulas. Fantástica mezcla.

Durum de cordero con lechuga, tomate, cebolla y salsa. Platillo que no entusiasmó.

Pìncho de pollo, bueno.

Leche con galletas, cereales y helado. Contraindicado para los detractores de la leche.

Maquis de mascarpone con chocolate.  Una muy buena idea que no entusiasmó.

Precio (2 personas): 39,40€ con una cerveza y dos refrescos además del total de ocho platillos. Aunque acudimos en busca de platos árabes, nos entusiasmaron más el resto de platillos tanto por su originalidad como por su búsqueda del buen hacer. Atención: no sirven cafés!

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¿Tienes pan duro en casa? ¡Haz migas!

Me entusiasman los platos del ayer. Siento que son platos que tienen una larga historia detrás y que merecen un gran respeto. Muchos de ellos nacieron consecuencia de la necesidad y el hambre y eso aún los hace más respetables. Pero, ¿os habéis parado a pensar cuán de listos fueron nuestros antecesores creando platos con muy poco y que alimentaran tanto?

Junto a la sopa de ajo, las migas es de los platos hechos con pan duro que más me gustan. La primera vez que las probé fue en Granada y desde entonces siempre he ido buscando dónde poder comerlas en mis alrededores. Desistiendo de que algún restaurante de Barcelona las sirva, abuelo y padre de mi querido compañero de batallas han satisfecho más de una vez mi capricho miguero.

Pero eso ya pertenece al pasado. Bastó ver el pan duro que acumulábamos día tras día en la cocina para animarnos a hacer las migas nosotros mismos. No es fácil pero tampoco muy difícil; el ingrediente más importante es la paciencia. 

Ingredientes:

1 barra de pan duro

4 cs de aceite de oliva

150 gr de tocino blanco (manteca de cerdo)

50gr de chorizo 

2 dientes de ajo

uvas al gusto

1. Troceamos el pan duro y le añadimos agua hasta que veamos que esté todo bien empapado. Dejamos reposar una media horita tapado en un bol para que se absorba todo el agua. Tiene que quedar todo blando, que se pueda desmigar con los dedos fácilmente y sin trozos de pan duro. 

2. Picamos bien el ajo y añadimos a una sartén con las cucharadas de aceite y el tocino blanco y el chorizo, ambos en dados. Cuando comience a dorarse el ajo lo apartamos del fuego y colamos el aceite.

3. Comprobamos que el pan esté correcto y desmenuzamos sobre la misma sartén con una cucharada del aceite anterior a fuego medio. Removeremos sin romper la miga, dando vueltas a la masa todo el rato. Añadiremos el aceite poco a poco a medida que vayamos viendo que las migas van cogiendo forma. 

4. A mitad de este último proceso, a los 7-8 minutos, incorporamos el ajo, tocino y chorizo a la sartén. Seguiremos removiendo hasta aproximadamente pasados otros 7-8 minutos o hasta que veamos que se han creado migas bien pequeñas. ¡Paciencia!

5. Lavar y cortar las uvas. Servir las migas con ellas por encima.