Centrifugadora de lechugas
Hacía mucho tiempo que quería tener una centrifugadora, que para mí, en prinicipio sólo tenía un uso, el de secar la lechuga una vez pasada por agua. Como estas fiestas pasadas había decidido que iban a ser unas fiestas con regalos útiles, yo me había pedido una centrifugadora de lechugas y no quería ningún regalo más (mentira ;-P).
Efectivamente tuve como regalo la magnífica centrifugadora y reconozco que todas las críticas que recibí, advirtiéndome que iba a ser un trasto que me iba a ocupar espacio en la cocina, tenían razón. Pero soy feliz porque cuando preparo ensaladas ya no veo la típica agüilla en el fondo del plato.