Julio es el encargado de dar los cursos, un hombre con una larga experiencia en cocina. Entre receta y receta nos contaba anécdotas y eso hizo que el curso fuera muy ameno e interesante. No sólo aprendimos de cocina japonesa sino de cultura gastronómica en general.
Primer día: Cocina Japonesa I
Aprendimos a cocinar:
– Pollo Yakitori. Pinchos de pollo con la salsa comúnmente conocida Yakitori. Qué buena le quedó, a ver si cuando nosotros la repitamos nos sale igual. De lo mejor del curso, sin duda. Además se trata de una salsa que se puede añadir a muchos platos, no sólo al pollo.
Una vez acababa el curso podías desgustar todo lo que se había cocinado. Todo riquísimo, desde el primer al último plato. Además todo acompañado de vino, un detalle por parte de los organizadores del curso.
¿Y si os digo que mi mala suerte hizo que no pudiera asistir al segundo curso de cocina japonesa? Pues sí, tuve que quedarme en casa y fastidiarme. Además para colmo fue por culpa de un virus estomacal que andaba ya por mi cuerpo el día que aistí al primer curso. Me lo perdí. En mi puesto mandé a mi hermana para que recopilara información y fotos. Una pena.
– Yakisoba, fideos soba salteados con gambas.
– Tataki de atún rojo.
– Mousse de te verde «matcha» japonés.
Sin duda, repetiré. Aunque el precio en un principio parezca algo elevado, 65 €/día y persona, teniendo en cuenta que al final es como si cenaras de restaurante, no me parece excesivo.
Lo recomiendo.
Ahora me queda repetir los platos en casa para ver qué tal me quedan.